¿Qué es Sed?

Allá por julio del 2007 (sí, quién diría que pasó tanto tiempo, no?), andaba enojada con mi inspiración ausente y decidí sentarme y obligarme a escribir algo. Vino una imagen a mi cabeza. Oscura, extraña. Jugué a describirla. Así surgió el primer capítulo de Sed (que en ese momento para mí era "estacosaquestoyescribiendo").

No soy una persona de esas que finalizan los proyectos que comienzan, pero a medida que surgieron capítulos y la gente se fue enganchando... adquirió este título (provisorio u_u jajaja) y ya no hubo marcha atrás.

Es gracias a ustedes -a su avidez de beber más y más de la trama- que Sed acaba de arribar a su capítulo 50, el último de la historia. Bueno, y a unos cuantos picotones de Pablo (mi novio) n_n

Ahora comienza la etapa de corrección, espero que no se haga demasiado larga... y a ver qué pasa con la editorial, porque tengo pensado publicarlo :D


Quiero agradecerles enormemente el aguante. La paciencia, los comentarios, las críticas, o que sólo hayan leído sin decir nada. Las palabras están para ser leídas, ese es su mayor destino.

Un abrazo gigantesco que los abarque a todos ^^


Sed es una historia que gira en torno a la soledad y la necesidad e idealización del otro. Es una novela salpicada de sangre, algo de sensualidad y mucho misterio.

Los acontecimientos que transcurren en ella, van entrelazando las vidas de los personajes. A veces para bien, a veces para mal... otras para peor.

Los invito a leerla y criticarla con confianza. De eso se alimenta mi escritura.


El contenido de esta historia puede resultar ofensivo para algunas personas, si usted es de esas que se ofenden.... por favor diríjase a otra parte.
Muchas gracias y disculpe las molestias ocasionadas.


Atte, La autora.

10/11/07

.: VIII :. (Castigo)


-Pero Roberto, está en una edad difícil, hay que entender. ¿Te acordás cuando vos...?

-No me vengas con esas pavadas, Norma ¿querés? Cuando yo tenía dieciséis años tenía que estudiar y trabajar o me rompían la cabeza –interrumpió Roberto exasperado.- No le pedimos tanto, me parece. ¡Y mirala! ¡La señorita se aparece con un tatuaje! Menos mal que mi madre no está viva para ver esto ¡porque volvería a morirse en un instante!

Sofía, con la cabeza gacha, esperaba a que todo terminara pronto para desaparecer en su habitación. Nunca hubiese imaginado que su madre entraría al baño mientras se duchaba a buscar cualquier cosa... ¿¡pero qué tenía que andar espiándola!? Apretó los dientes. No podía articular palabra. No le convenía.

-Y como si fuera poco, ¡un 1 en matemáticas! ¿Para qué le pago yo a la boluda de enfrente, me querés decir?

-Shhh, Roberto, a ver si te escucha.

-¡Que me escuche! ¡Si le pago al pedo! Porque ésta no es tonta, si le explicás bien te entiende. Mirá ¿sabés qué hago ahora? Te consigo un profesor en serio. Uno de universidad si hace falta, ¡pero vos me levantás esa materia como que me llamo Roberto Froilán Salcedo! ¡Y que yo no me entere que salís de esta casa más que para estudiar!

Un portazo puso el broche final al discurso. Sofía escupió una carcajada. No podía evitarla cada vez que oía a su padre proclamar con orgullo su segundo nombre.

Su madre le arrojó una mirada reprobadora y ella huyó hacia su habitación.

Se desparramó sobre el acolchado azul oscuro salpicado de estrellas y se abrazó a la almohada.

Tanto el 1 como el tatuaje habían valido la pena. Sentía un extraño alivio por no tener que ocultarlos más. Formaban parte de ella, tanto como de él.

No sabía de qué manera continuarían desarrollándose las cosas de ahí en adelante, pero el castigo no duraría demasiado. No cuando lo único que estaba haciendo era lo que su padre le había enseñado a lo largo de toda su vida: luchar por conseguir aquello que deseaba.

Matemáticas era solucionable y el tatuaje era un escalón subido, un paso más cerca. Nadie podía condenarla por ello.

Aquella noche la cena se desarrolló en medio de un silencio espeso, sólo interrumpido por la voz de su padre sentenciando:

-Mañana a las tres viene un profesor de Matemáticas de verdad. A eso de las dos y media te cruzás y le explicás a la de enfrente por qué no vas a ir más.

Sofía tragó la ensalada sin emitir sonido. Sabía lo que tenía que hacer. Actuar como una niña buena para convencer a papi de que levantara el castigo.


Las dos y media de la tarde siguiente encontraron a Sofía abandonando la casa de su ex profesora de Matemáticas con una sonrisa maliciosa en el rostro. Estaba hecha para mentir sin escrúpulos. Su vecina nunca hablaba con sus padres, no tenía por qué enterarse de su fracaso.

Ya se había acomodado en un sillón a mirar la televisión cuando el timbre sonó y Sofía, totalmente desganada, acudió al llamado casi arrastrando los pies.

Espió por la ventana el rostro de su nuevo profesor. Era más joven de lo que había supuesto. Quizá no se aburriría tanto después de todo.

Abrió la puerta y lo miró a los ojos. Él se sonrojó de inmediato y bajó la cabeza como queriendo ocultar su rostro. Era lindo, pese a que parecía avergonzarse de ello.

-Soy Sebastián, el profesor de Matemáticas que llamaron para preparar a Sofía Salcedo –dijo en voz muy queda.

Sofía ensanchó su sonrisa y lo invitó a pasar.

5 comentarios:

Nino dijo...

PFFF... Es lo que necesitaba yo en la secundaria, un chongo alto y buen mozo que viniera a HACERME ENTRAR EN RAZÓN. Como el chongo del quiosco de al lado. Cada día se hace más duro ir a comprar alfajores.
Che, pero dejá de rodearla de tipos lindos. Se está poniendo mejicana la novela, Sofía va a terminar debatiéndose entre el preceptor y el profesor particular? O les va a dar amor a los dos encantadísima de la vida? Tengo una pequeñísima "crítica" que hacer: "Se desparramó sobre el acolchado azul oscuro, salpicado de estrellas SIMULANDO LA NOCHE, y se abrazó a la almohada."
Es una cuestión totalmente estílística, pero me choca ese predicativo en esa estructura. No sé, me parece que sobra.

Natalia Caceres dijo...

No te adelantes, zoquete :P de mexicana nada.
A mi como que también me quedó rebotando esa frase, pero creo que al final no me molestó tanto y la dejé. Veremos después, cada tanto me agarra el ataque y me pongo a enderezar algunas cosas.
Gracias por comentar ^^ ya me estaba sintiendo sola :P

Matías Orange dijo...

Pobre el Sebas...


Sobre llovido, mojado, por lo leido...


Me va gustando mucho, che....


Saludos!

Sabalero dijo...

Parece que esta bueno che, voy llegando tarde pero llegando al fin (a traves de peinate que viene gente), por ahora interesado

Natalia Caceres dijo...

Bienvenido, sabalero! Me sonaba tu nick pero no podia ubicar de dónde. Ahora si :)
Nunca es tarde, mas aun sabiendo lo lenta que me puse ultimamente, no te preocupes.
Muchas gracias por leer :D